Publica el diario clarín, en el día de hoy y en la doble página que destina a editoriales, un texto firmado por la señora Vilma Martínez, embajadora de los estados unidos de norteamérica en argentina. En el mismo, titulado La violencia contra la mujer es delito y con motivo de estos 16 días que van del 25 de noviembre (Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer) al 10 de diciembre (Día Internacional de los Derechos Humanos), la embajadora describe a la violencia de género como una pandemia mundial que atraviesa etnias, razas, clases sociales, religiosas, niveles educativos y fronteras internacionales. Dice género, dice razas, dice fronteras. No obstante, estoy muy de acuerdo con la idea general. Dice también que el único elemento común radica en la elección de las víctimas por su condición de mujer. Dice único elemento común, dice elección / víctimas / mujer. Dice que la violencia de género no es sólo privativa de la mujer; atenta contra los derechos humanos y la seguridad en todo el mundo. Si no dijera “y la seguridad”, mi adhesión sería total.
Y dice, así, en bold, que la violencia contra la mujer no es una cuestión “cultural” sino de orden delictivo, y que es un problema que atañe a todas las naciones y requiere una respuesta proporcional a este tipo de delitos.
Ahí me detengo, dice “Cultural”.
Y dice, así, en bold, que la violencia contra la mujer no es una cuestión “cultural” sino de orden delictivo, y que es un problema que atañe a todas las naciones y requiere una respuesta proporcional a este tipo de delitos.
Ahí me detengo, dice “Cultural”.
Cultural sin comillas referiría a la cultura de los cultos? Por qué “cultural”? porque la violencia no debería formar parte de la cultura, por ejemplo? porque afirmar que es cultural es aceptar que los cambios son a larguísimo plazo?
Y pienso que, tal vez, no sea una cuestión “cultural”, sino una cuestión cultural. Que tal vez para evitar hacerse eco de las polémicas desatadas durante este año en holanda, egipto y marruecos, la embajadora elude cualquier referencia a la obligatoriedad religiosa que dicta el uso de niqabs y burkas…
Si, me gusta exagerar.
Y pienso que, tal vez, no sea una cuestión “cultural”, sino una cuestión cultural. Que tal vez para evitar hacerse eco de las polémicas desatadas durante este año en holanda, egipto y marruecos, la embajadora elude cualquier referencia a la obligatoriedad religiosa que dicta el uso de niqabs y burkas…
Si, me gusta exagerar.
Peeero, sin exagerar: género / raza / frontera / seguridad / delito … ES una cuestión cultural!
Oiste hablar de “circuncisión femenina”? Si lo buscás, vas a encontrar que la mal llamada circuncisión femenina es una práctica muy arraigada, extendida por alrededor de una treintena de países (áfrica subsahariana y nordoriental, medio oriente, sur de la península arábiga, malasia, indonesia, india y australia). Vas a encontrar que ya Herodoto hacía referencias a esta espantosa práctica realizada por fenicios, hititas, etíopes y egipcios en el siglo V. Se trata ni más ni menos que de la ablación de labios vaginales y clítoris, un horror que se practica con instrumentos rudimentarios, sin anestesia. Mutilación física y sexual, por si hiciera falta decirlo, circunscripta a la historia de la sumisión de la mujer.
Vas a encontrar que, con diferencias entre etnias, la aberración suma cuatro grados en una escala del terror, según se lo practica al día de hoy:
Grado 1: pliegue superior del clítoris (comparable con la mutilante circuncisión masculina, que priva a los varones de una parte de su cuerpo que desempeña una función en la vida sexual).
Grado 2: clítoris completo y parte de los labios.
Grado 3: clítoris completo, labios mayores y menores.
Infibulación: clítoris completo, labios mayores y menores, sumado a que se cose la vulva dejando una pequeña abertura que únicamente permite la salida de orina y el sangrado menstrual. Como lo que se busca con la infibulación es la fidelidad hacia el marido que viaja, la vulva se cose y descose en repetidas ocasiones.
Vas a encontrar que esta atrocidad es realizada generalmente por ancianas desprovistas de la menor competencia quirúrgica, con algún objeto afilado y hierbas. Que los problemas de salud posteriores son de toda índole: hemorragias que pueden provocar la muerte, lesiones de recto y uretra, infecciones, fístulas. A ello agregale los traumas psíquicos anteriores y posteriores a la castración.
Oiste hablar de “circuncisión femenina”? Si lo buscás, vas a encontrar que la mal llamada circuncisión femenina es una práctica muy arraigada, extendida por alrededor de una treintena de países (áfrica subsahariana y nordoriental, medio oriente, sur de la península arábiga, malasia, indonesia, india y australia). Vas a encontrar que ya Herodoto hacía referencias a esta espantosa práctica realizada por fenicios, hititas, etíopes y egipcios en el siglo V. Se trata ni más ni menos que de la ablación de labios vaginales y clítoris, un horror que se practica con instrumentos rudimentarios, sin anestesia. Mutilación física y sexual, por si hiciera falta decirlo, circunscripta a la historia de la sumisión de la mujer.
Vas a encontrar que, con diferencias entre etnias, la aberración suma cuatro grados en una escala del terror, según se lo practica al día de hoy:
Grado 1: pliegue superior del clítoris (comparable con la mutilante circuncisión masculina, que priva a los varones de una parte de su cuerpo que desempeña una función en la vida sexual).
Grado 2: clítoris completo y parte de los labios.
Grado 3: clítoris completo, labios mayores y menores.
Infibulación: clítoris completo, labios mayores y menores, sumado a que se cose la vulva dejando una pequeña abertura que únicamente permite la salida de orina y el sangrado menstrual. Como lo que se busca con la infibulación es la fidelidad hacia el marido que viaja, la vulva se cose y descose en repetidas ocasiones.
Vas a encontrar que esta atrocidad es realizada generalmente por ancianas desprovistas de la menor competencia quirúrgica, con algún objeto afilado y hierbas. Que los problemas de salud posteriores son de toda índole: hemorragias que pueden provocar la muerte, lesiones de recto y uretra, infecciones, fístulas. A ello agregale los traumas psíquicos anteriores y posteriores a la castración.
Y que SI es cultural. Porque, como tema relacionado a lo sexual, es un tema tabú. Ninguna “circuncisa” lo manifiesta ni consulta al médico por cualquier problema relacionado.
El placer sexual queda así vedado por siempre, es obvio, como obvio es que el coito se transforma en tortura. No me atrevo a imaginar un parto sin una riesgosa episiotomía.
El placer sexual queda así vedado por siempre, es obvio, como obvio es que el coito se transforma en tortura. No me atrevo a imaginar un parto sin una riesgosa episiotomía.
Es cultural.
La mutilación genital femenina no sólo resguarda la virginidad de las niñas / adolescentes, o impide la masturbación y el placer sexual: es una ceremonia comunitaria que tiende a la perpetuación social y política de la organización. Por lo tanto, el acto se encuentra en el entramado psicosocial, con ceremonias especiales, ritos tradicionales, creencias, costumbres, valores. En algunas etnias simboliza la ofrenda o el sacrificio de una parte de los órganos genitales a las divinidades que presiden la fecundidad. Símbolo / sacrificio / divinidad / presidir / fecundidad. Es cultural. En otras etnias, es un rito iniciático que encauza la transición de la pubertad a la adultez.
Un uso tan antiguo sólo subsiste rutinariamente por el temor de las comunidades a perder su identidad. Qué otra cosa es la cultura?
La mutilación genital femenina no sólo resguarda la virginidad de las niñas / adolescentes, o impide la masturbación y el placer sexual: es una ceremonia comunitaria que tiende a la perpetuación social y política de la organización. Por lo tanto, el acto se encuentra en el entramado psicosocial, con ceremonias especiales, ritos tradicionales, creencias, costumbres, valores. En algunas etnias simboliza la ofrenda o el sacrificio de una parte de los órganos genitales a las divinidades que presiden la fecundidad. Símbolo / sacrificio / divinidad / presidir / fecundidad. Es cultural. En otras etnias, es un rito iniciático que encauza la transición de la pubertad a la adultez.
Un uso tan antiguo sólo subsiste rutinariamente por el temor de las comunidades a perder su identidad. Qué otra cosa es la cultura?
20 comentarios:
No se puede ayudar donde la ayuda no es bienvenida.
Quizás sea más fácil mirar "horrores" de otros que tapen nuestros gagantescos errores latinoamericanos.
Falta compromiso.
Trata de blancas.
De ese horror no se habla.
Caballero, un excelente analisis, no hay nada mas que agregar y me adhiero a su posición.
Saludos
Sabri! puf, si.
Quzás, cambiar la óptica. Suceda en dónde suceda, es problema de todxs. No lo llamemxs ayuda, no lo llamemxs de ninguna manera. Se trata lisa y llanamente de erradicar la esclavitud. La de todxs.
Un beso grandote.
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Gracias, Akira. Hace tiempo que se lo extraña.
Un abrazo.
¿y qué cosas querrían cambiar esos pueblos en nosotros los occidentalizados que usamos blog?
occidónde
No estoy de acuerdo, si ellas no quieren cambios, ocupémonos de nuestra gente.
Tratante=sorete,misógino,malparido.
Alex me gustó mucho este post, el maltrato me enoja y entristece y cuanto más me entristece más me enojo y así.
Sonrisa pacífica para usted.
qué bueno que no nací hombre y no tuvo que cortármela un man con rulitos largos a los costados de las orejas.
En cambio, Sabri, yo no estoy en desacuerdo con vos. Ocurre que todxs las personas son mi gente. Una cosa no quita a la otra. Traje a cuento un ejemplo de los innumerables que existen.
Y si, está más que claro que eufemismos del tipo "tratante" y "blanca" son una forma más de violencia cultural.
:) como si fueramxs hermanxs, mirá.
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zafastesss, Male: como si el prepucio fuera una manga! Que es más higiénico es un verso de acá a la tierra prometida. Menos lubricación, menos sensibilidad y un dolor marcado a fuego en tu inconsciente.
Hoy te mereces un aplauso y un abrazo. Bueno, dos aplausos.
Gracias, Mendita. Guardaré al segundo aplauso para los postres.
Interesantisimo post Alex, adhiero a tu enfoque en el área cultural que planteas, y creo que se le debe una discusión más extensa cerveza de por medio a este tema. Ya que la violencia es violencia, no importa su envase, lo cual plantea carácter delictivo. Y el ser humano es violento. Además es necesario el tiempo en ciertos cambios, que también lo mencionás por cierto, y yo lo creo impresindible para disgregar o extinguir ciertas ideas/costumbres culturales a las cuales no se les terminó su hora, en fin... evolución
Claro que es de todxs… qué el mandato femenino sea casarse: es violencia, usar un vestido blanco que simboliza tu virginidad y castidad: es violencia, tener un previo cumpleaños de 15 simil novia: es violencia. El trabajo doméstico asignado socialmente a la mujer y no remunerado ni consensuado: es violencia, que muchas muchísimas mujeres latinoamericanas no alcancen jamás un orgasmo en su vida, a pesar de ser fervientes madres y sumisas esposas: es violencia. Formalizar la monogamia con papeles, y eliminar el deseo: es violencia. Que la mayoría de las mujeres latinoamericanas corran más riesgos en sus casas que en la calle, de ser muertas en manos de sus maridos, parejas, amantes: es violencia. Tener un sueldo inferior, en este sistema capitalista de mierda, por ser mujer: es violencia. La heterosexualidad obligatoria: es violencia (el rosa a las nenas el celeste a los nenes: es violencia). Que miles de mujeres pobres, sin recursos de ningún tipo, algunas violadas por sus parejas o vecinos o hermanos, o lo que es peor niñas violadas y embarazadas en sus casas, o en la escuela o en la calle, mueran por abortos clandestinos en deplorables condiciones higiénicas, pudiendo ser evitable (todo lo anterior que las llevó a esa situación y el aborto en sí): es violencia. Que te rapten para la trata o lo que es peor (como en la mayoría de los casos) que te prostituya tu viejo, tu padrastro, tu tío, tu hermano, y que mi viejo, mi tío, mis hermanos, mi vecino, mi amigo, “vaya de putas”: es violencia. Que el estado esté involucrado en la trata desde siempre y que sean ellos los que deben “combatirla”: es violencia. Que te menosprecien, que no valoren tu inteligencia, tu trabajo, tu talento y que exista Tinelli: es violencia. Que nazca una persona que no encaja con el género hombre o mujer, entonces los médicos para normalizarlx le ablacionen parte de sus órganos sexuales, para poder asignarlxs a un género, causándole daños irreversibles tanto psicológicos como físicos…pasa todos los días, y no en África, pasa en los hospitales de la vuelta de la casa…obvio que es violencia. Desgraciadamente podría seguir enumerando formas de violencia…pero prefiero guardar la energía para pensar o al menos intentar hacer algo o ayudar a las personas que buscan soluciones.
Ufff
Todo un tema el de hoy no?
Besos Al.
que te deje embarazada el cura cuando estás en edad de tomar la "comunión" y sea este mismo, el que prohíbe los anticonceptivos, la educación sexual y los abortos...y que en tu casa y tus vecinxs tapen todo porque son católicos...¿lo tengo que decir? ES VIOLENCIA.
Muy bien planteado, tiene lógica y tiene convicción. Hace tiempo me encontré con quien argumentaba que la violencia de género es un antojo del feminismo, siendo que los varones padecen índices de violencia mayores, el ejemplo era que son reclutados sistemática y exclusivamente para combatir en el frente. Pero nadie los considera víctimas por su género, sino por su condición social en general. No consiento en usar ese argumento como negación o invalidación de la violencia contra las mujeres: la violencia, entre otros problemas relacionados con el género, siempre lleva inscrito el sello de la cultura, en este caso, del machismo aún vigente, del cual somos tanto víctimas como victimarios los varones y las mujeres. Me gustó que dejaras esa impronta, según creo leer, en tu exposición.
Gracias!
la vida se abre camino
el amor busca el futuro
la comunicacion es imprescindible
XXOOS
Pues,hoy te has salido del pellejo,quiero decir...que esta entrada es genial.
Un beso
si este mundo se globalizó, si se abolieron las distancias... qué revolución CULTURAL será aceptar que ciertas coas son un tema CULTURAL -precisamente-
y no "cultural"
cobarde-mente
violenta-mente
que piensa que eso tan feíto, tan desagradable, tan ensangrentante
no me pasa a mí
no te pasa a vos
la tentación es diferenciarse al punto que quede lejos y fuera de toda esta "barbarie"
...
algo más:
cuando los antropólogos, historiadores y afines se pongan de acuerdo en refernciar el matriarcado como un estado cooperativista que se dió de diversos modos en todo el mundo, quizás acuerden también en encontrar los rastros que barbaries como las que narra alex por allá o la ostra por acá son todos indicios CULTURALES del varón temiendo el poder orgásmico y procreador de la mujer...
(dame hijos)
(no goces)
(no cojas)
(dame tus hijos a mí)
y algo se tiñe al punto que mi abuela -y no hace tanto- cuando la insté a hablar de sexo
se enorgullecía a sus 70 de no haber tenido orgasmos...jamás
((se feliz empapada en mi violencia))
abrazos, alex
qué temita alex..a veces las cosas son así y todo lo que podemos hacer es debatir, impotencia mucha, valga la metáfora. Gracias por el regalo de cumple!! abraxos.
hola, chicxs
a todxs y cada unx:
GRACIAS !!!
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